Y creía que ésto dependía del destino, de lo que él quisiera, de los demás, de la situación actual en la que me encontraba; así que simplemente dejé de luchar, dejé de pelear y deje de esforzarme por mis sueños, para simplemente quedarme allí, atrapad@ en un callejón sin salida, con la única esperanza, de que alguien venga y me rescate de la cruel vida, que realmente, son mis propios pensamientos.
Y ahora, no puedo creer, que por tanto tiempo me haya rendido, que por tanto tiempo hubiera sido una ignorante, que realmente no quería aceptar que el hecho de ser encontrado, depende de si mism@, que aquéllo que debe de pasar para que todo cambie, tiene un nombre y un rostro: tu
Que el hecho de quedarse con los brazos cruzados, a la espera de una luz que llegue y brille tu vida, es tan ridículo como esperar que en el desierto llueva... Y es que sólo en el momento en que realmente te esfuerces, que entiendas que tu destino únicamente depende de lo que hagas o no, allí, en ése momento, vendrá aquella luz que cambie tu vida...
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