No Te Rindas

A veces la situación puede ser difícil, sofocante, deprimente, triste... como quieras llamarlo, pero aún así NO TE RINDAS, si lo hicieras, ¿acaso crees que las cosas mejorarían?, ¿crees que en un futuro no te volverás a encontrar en la misma situación?, y si así fuera, ¿qué harías? lo más probable es que como ya te rendiste una vez, tu temor pudo haber crecido en el transcurso del tiempo, y claramente, volverías a rendirte, una y otra vez... Hasta que toda tu vida, o al menos las situaciones más decisivas se conviertan en algo torpe, a lo cuál, tu única respuesta será huir; porque el temor e inseguridad de una pequeña decisión, al no enfrentarlo, puede crecer hasta entorpecer e intervenir en cada uno de los sucesos más importantes de tu vida.

Sé que vencer el deseo de rendirse no es fácil, lo sé porque más de una vez me he propuesto seguir adelante con toda mi alma, y más de una vez, por la simple inseguridad, me rendí e intenté estúpidamente  olvidar todo, y hacer de cuenta que no había otra opción que simplemente huir; pero también he tenido momentos en que después de desilusionarme pude seguir adelante... Lo que quiero decir, es que habrán momentos muy difíciles para frenar los impulsos de rendirse, y más de una vez lo harás,  pero lo fabuloso de caer, es que estás más cerca de volver a levantarte y aprender nuevas cosas.